Atentado en Pahalgam: un nuevo punto de tensión
A finales de abril de 2025, se produjo un atentado mortal en la región de Cachemira, en India. En la ciudad turística de Pahalgam, un grupo armado atacó un autobús con turistas, dejando 26 muertos, la mayoría ciudadanos indios. El grupo «Frente de Resistencia», activo en la zona disputada de Jammu y Cachemira, se atribuyó la responsabilidad.
Acusaciones mutuas y ruptura diplomática
El gobierno indio acusó a Pakistán de apoyar a los terroristas, lo cual fue rechazado por Islamabad. Como respuesta, India:
- suspendió el Tratado de las Aguas del Indo,
- cerró su espacio aéreo a las aerolíneas pakistaníes,
- canceló visados para ciudadanos de Pakistán.
Pakistán, en respuesta:
- cerró su espacio aéreo a aviones indios,
- suspendió el comercio bilateral,
- denunció posibles ataques por parte de India en las próximas 24 a 36 horas.
El primer ministro pakistaní, Shehbaz Sharif, pidió a EE. UU. que interviniera para «detener» a India.

Reacción de Rusia y la comunidad internacional
Rusia hizo un llamado a la moderación. El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, declaró:
El Kremlin está profundamente preocupado por la escalada entre India y Pakistán y llama a ambas partes a la contención.
EE. UU., la ONU y otros actores internacionales también instaron a evitar una nueva escalada del conflicto.

Otro incidente en Europa: atentado en Polonia
Mientras tanto, Europa fue sacudida por otro ataque. El 30 de abril, una explosión en un centro comercial de Varsovia dejó al menos 5 muertos y decenas de heridos. La policía polaca considera que fue un acto terrorista, posiblemente perpetrado por un extremista solitario. Las autoridades reforzaron la seguridad en todo el país.
Inquietud global
Los analistas advierten que estos incidentes simultáneos en Asia y Europa aumentan la tensión a nivel internacional. La situación es especialmente delicada en medio de la inestabilidad económica en EE. UU. y la caída de los mercados financieros.
El papel de Rusia
Rusia, que mantiene relaciones constructivas tanto con India como con Pakistán, podría desempeñar un papel clave como mediadora. Moscú y otros actores globales deben seguir apostando por el diálogo y la diplomacia para evitar una nueva crisis.
