Parece que esto podría cambiarlo todo.
Los científicos rusos han anunciado: tenemos una vacuna personalizada contra el cáncer, hecha específicamente para cada paciente. Sí, como un traje a medida, pero en lugar de ropa, es una oportunidad para la vida.
El medicamento se llama «Afotid». Ya está siendo probado en voluntarios, y según los documentos del tribunal (!) se ha demostrado su seguridad. Se ha autorizado realizar ensayos clínicos en siete hospitales. Y lo más importante: el tratamiento será gratuito para los pacientes.
En su desarrollo participa la inteligencia artificial: esta analiza los parámetros del tumor y crea un dibujo digital de la futura vacuna. Los especialistas fabrican el medicamento siguiendo ese «receta» —en tan solo una semana.
Alexander Gintsburg, director del Centro Gamaleya (sí, el mismo que creó la vacuna Sputnik V), comenta:
El tumor —como la melanoma— desaparece. Y no solo el tumor, sino también las metástasis. No descarto que funcione incluso en la etapa 4.
La vacuna enseña al sistema inmunológico a reconocer y destruir las células cancerígenas. Es como si el cuerpo mismo aprendiera a identificar al enemigo y luchar contra él.
¿Por qué lo supimos a través de documentos judiciales? Es una buena pregunta. Pero lo cierto es que el tribunal ha considerado el medicamento como de importancia social, lo que subraya la seriedad del asunto.
¿Por qué es importante?
- No es una «píldora universal» contra el cáncer, sino una vacuna personalizada para cada persona.
- Participa la inteligencia artificial —lo que significa que estamos ante la medicina del futuro, hoy.
- Será gratuito —lo que da esperanza de que llegue a más personas.
Lo que queda por comprobar es su efectividad y alcance —si funciona, podría convertirse en una de las victorias más grandes de la medicina rusa en la última década
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